El lago Vembanad, uno de los lagos de agua dulce más grandes de Kerala, es una impresionante parada turística. Rodeado de manglares y cocoteros, el lago brilla como un espejo lo que lo hace un lugar ideal para visitar en casa flotante y así llenarse de alegría y paz. El paseo en crucero permite a los turistas explorar la región, pasando por pequeñas aldeas e islas del interior de la laguna. Los tranquilos cruceros por el lago son ciertamente una experiencia única. Ya sean cortos en pequeñas canoas o botes, que serpentean a través de canales estrechos, o de mayor duración en una lujosa casa flotante, surcando las aguas color esmeralda bordeadas de palmeras y cocoteros, uno siempre puede ir viendo cómo se desliza de fondo el sereno campo.

Las casas flotantes que navegan aquí son modificaciones de los tradicionales kettuvallams, grandes embarcaciones comerciales que solían ser utilizadas para el transporte de arroz y especias a las ciudades cercanas. A medida que el transporte por tierra ganó importancia, estos elegantes gigantes de la navegación se vieron obligados a transformarse en hoteles flotantes que ofrecen a los turistas todos los lujos de la vida moderna. Si bien la belleza escénica alrededor de los canales es fascinante, estas casas flotantes espaciosas y hermosamente decoradas se suman al encanto de la experiencia.

Tradicionalmente, un kettuvallam mide alrededor de 18 metros de largo y 4,5 metros de ancho aunque sorprendentemente algunas casas flotantes llegan a tener una longitud de más de 25 metros. Construidos a partir de materiales naturales de origen local, como madera de árbol de jaca, madera de palma, fibra de coco, postes de bambú, cuerdas y esteras de bambú, estos barcos ofrecen un paseo libre de culpa. Esto se debe a que se construyen atando tablas de madera con fibra de coco en lugar de usar clavos de metal. Los tablones están recubiertos con resina extraída de cáscaras de castaña de cajú. Los techos se arman con postes de bambú y hojas de palma y algunos de estos barcos hasta tienen paneles solares para generar electricidad. Si se mantienen correctamente, pueden durar décadas.

Con una longitud de 83,7 kilómetros y un ancho de 14,4 kilómetros, el lago Vembanad alberga a la isla Pathiramanal, o arenas de medianoche, una pequeña y hermosa isla que flota serena en este remanso y es un paraíso para los observadores de aves. Cuenta con alrededor de 50 especies de aves exóticas y 91 tipos de aves endémicas. Algunas de las aves comunes que se pueden ver aquí incluyen la cerceta, el pato de cola puntiaguda, el cormorán, la garza nocturna, el aníngido, el cormorán indio, el pato silbador, el cormorán de Java y el fumarel cariblanco. La isla también brinda muchas plantas medicinales. La temporada ideal para visitar el lago es durante agosto y septiembre, cuando es sede de varios festivales.

Durante el festival de la cosecha de Onam, se puede disfrutar de las carreras de botes de serpiente, que son un espectáculo de una belleza única en el que sorprende ver hasta cien personas por bote, atravesando las aguas. Otra particularidad de este lago es el Thanneermukkom Bund, una barrera de agua salada que actúa como el regulador de lodo más grande del país dividiendo el lago en dos: una mitad con agua salada perenne y la otra con agua dulce enriquecida por los ríos.