Una alfombra verde esmeralda moteada de flores coloridas, Nagaland parece el lienzo de un pintor. Para el aventurero y el intrépido, Nagaland es el lugar ideal para el senderismo, escalada sobre rocas, acampadas en la selva con un sin número de opciones para la exploración en sus verdes y exuberantes bosques subtropicales, que son también un tesoro oculto de una plétora de plantas medicinales.Aún más allá, el turista puede tener una verdadera experiencia de la cultura étnica Naga con sus mejores fermentos servidos en jarras de bambú y una cocina exótica muy celebrada en este lugar.

La ubicación de la región y su riqueza en biodiversidad le han convertido en un sitio de interés para los turistas. Abarcando colinas, montañas, planicies y mesetas, grupos culturales y comunidades varias, una biodiversidad singular, no sorprende que atraiga con facilidad a turistas de todo el mundo.

Su capital, Kohin, es conocida como la tierra de la tribu Angami Naga y su nombre deriva de "Kewhira" o "Kewhima", que significa el lugar donde crece la flor Kewhi. La ciudad serpentea alrededor de la cordillera montañosa hasta la cima y ofrece una mezcla de naturaleza y cultura y tradición tribal. Situada contra el telón de fondo de la cordillera montañosa Japfu, la ciudad exhibe un terreno rocoso y muchos senderos panorámicos ideales para los amantes de la aventura y las emociones intensas.

El mejor momento para disfrutar la ciudad es durante el internacionalmente reconocido Festival del Cálao, un mosaico de cultura, festividades, danza, arte, artesanía, comida y música. La jamboree anual, en diciembre, recibe miles de visitantes que animan la ciudad.